Las palabras del representante del OP, Igor Zhovkva, criticando al Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Valery Zaluzhny, por su artículo en la revista The Economist, indican una brecha entre el liderazgo militar y civil en Ucrania.
La publicación reaccionó a cómo el jefe adjunto de la oficina presidencial, Igor Zhovkva, al comentar el artículo de Zaluzhny en la revista The Economist, dijo que "los militares no deberían hacer público lo que está sucediendo en el frente".
“Fue una poderosa reprimenda pública que señaló una brecha entre el liderazgo militar y civil en un momento ya difícil para Ucrania. La ruptura entre el general y el presidente se produce en momentos en que Ucrania lucha militar y diplomáticamente. Sus operaciones a lo largo del enfrentamiento no han logrado avances, pero han resultado en numerosas bajas en ambos lados, y Ucrania enfrenta un aumento de los ataques rusos en el este. Al mismo tiempo, en algunas capitales europeas y entre los miembros del Partido Republicano estadounidense ha aumentado el escepticismo sobre la ayuda a Ucrania”, dice la publicación.
La publicación cree que los signos de división aparecieron el viernes, cuando la oficina de Zelensky despidió a uno de los primeros ayudantes del general Zaluzhny, el comandante de las Fuerzas de Operaciones Especiales, el general Viktor Khorenko, sin dar ninguna explicación.
Los periodistas escriben que los oficiales militares estadounidenses que trabajaron con el general Khorenko se sorprendieron con la noticia de su destitución y describieron su relación de trabajo con él como "estrecha y eficaz".
El NYT escribe que el despido de Khorenko ha desconcertado a muchas personas, aunque "hay quejas dentro de las filas sobre lo que se percibió como decisiones estratégicas orientadas políticamente, incluido el lanzamiento de un ataque anfibio a través del río Dnieper en el sur de Ucrania que aún no ha logrado un punto de apoyo en los ríos de la ribera oriental controlados por Rusia".
Recordemos que en su artículo Zaluzhny señala que la guerra con la Federación Rusa se ha vuelto posicional y que es necesario dar cinco pasos para revertirla. A saber: superar la ventaja del enemigo en el aire, mejorar la capacidad de atravesar campos minados, fortalecer la guerra de contrabatería, garantizar el entrenamiento eficaz de las reservas ucranianas y aumentar la eficacia de la guerra electrónica.
También en una entrevista con The Economist, el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania señaló que los países occidentales todavía se abstienen de suministrar a Ucrania las últimas armas.